Cobots: los responsables de la relocalización de mano de obra

Desde hace muchos años, las industrias externalizan gran cantidad de operaciones de manufacturación a paí­ses donde la mano de obra es más barata con la intención de reducir los costes de producción. Este hecho ha supuesto un giro dramático dentro del mundo laboral. Con el reciente incremento del costo de mano de obra en diferentes paí­ses, los fabricantes se están dando cuenta de que las ventajas económicas de producir en el extranjero se están reduciendo considerablemente.

Además, las empresas también están viendo que la deslocalización, generalmente, va ligada a la incorporación de una logí­stica compleja, tiempos de enví­o adicionales y, como dificultad añadida, impide reaccionar de forma rápida y ágil a los cambios que demanda el cliente. Otros aspectos negativos que produce la deslocalización son: provoca que una empresa tenga que ceder ante otra y que pierda parte de su conocimiento, que su know-how pase a terceros y, en muchas ocasiones, hace que aumente el porcentaje de productos defectuosos. Estas razones son las que llevan a los fabricantes a plantearse nuevas formas de reducir los costes de fabricación y aumentar la productividad.

La automatización como solución

El proceso de automatización a través de tecnologí­as robóticas avanzadas y rentables está contribuyendo a que las empresas de todos los tamaños sigan siendo competitivas en cuanto a costes, al mismo tiempo que mantienen sus procesos de fabricación en su paí­s de origen.

De acuerdo con un estudio de Boston Consulting Group, la proporción de empresas que han llevado a cabo el reshoring, o relocalización, ha aumentado en un 9 % desde 2014 y en un 250 % desde 2017. Este hecho demuestra que las empresas que iniciaron el reshoring en los últimos tres años, están ahora adquiriendo un mayor protagonismo.

El 56 % de los empresarios a nivel mundial cree que la disminución de los costos gracias a la automatización ha mejorado la competitividad de sus productos. Por otro lado, 71 % cree que las tecnologí­as avanzadas de fabricación mejorarán la economí­a de la producción localizada. Son casi tres cuartos, 72 %, los que tienen previsto invertir en sistemas de automatización adicionales o tecnologí­as avanzadas de fabricación en los próximos cinco años.

En relación con el empleo, no se espera que este incremento de la automatización en la industria tenga un impacto negativo sobre la generación de puestos de trabajo. El estudio muestra que 50 % de los empresarios a nivel mundial anticipa la creación neta de empleos manufactureros durante los próximos cinco años, y 74 % valora el acceso a una mano de obra calificada como un factor importante para trasladar la producción a su mercado interno.

¿Por qué formar parte del reshoring?

Hay muchas razones para que los fabricantes reevalúen las configuraciones tradicionalmente deslocalizadas para procesos que requieren una gran cantidad de mano de obra, y consideren la reafirmación como una alternativa comercialmente viable.

Las empresas están reconociendo cada vez más que las consideraciones anteriormente ignoradas, incluidos los costos, riesgos e impactos estratégicos más o menos ocultos, son en realidad lo suficientemente grandes como para superar la disminución de la ventaja salarial en ubicaciones en el extranjero. Están viendo los fuertes y múltiples beneficios de ubicar actividades clave en las proximidades del mercado local.

Además del hecho de que los salarios en el extranjero aumentan de manera constante, las principales razones para que las empresas deben impulsar la relocalización o “reshoring” incluyen:

• Acceso más fácil o mejor a una fuerza laboral capacitada capaz de agregar valor concreto a un producto o proceso. 
• Respuesta más rápida a las cambiantes demandas de los clientes y preferencias del mercado, debido a los plazos de entrega más cortos. 
• Reducción de costos logí­sticos y menores impactos ambientales. 
• Monitoreo y verificación de la calidad y consistencia del producto. 
• Menos inventario requerido, debido a una mayor capacidad de respuesta. 
• Retención más fácil de los beneficios disponibles de las capacidades y la experiencia provistas por trabajadores humanos calificados. 
• Mejores oportunidades de innovación y diferenciación de productos.

Mayor inclusión y responsabilidad

Cuando las operaciones de fabricación y procesamiento se llevan a cabo “cerca del hogar” es probable que los trabajadores involucrados tengan más sensación de participación y responsabilidad en relación con sus prácticas de trabajo y sus efectos.

Cualquier falla de calidad e impacto ambiental probablemente tendrá algún tipo de repercusión directa o indirecta para ellos, sus impuestos y su propia sociedad. Esto puede proporcionar una buena motivación para un mayor sentido de responsabilidad en las operaciones de una empresa.