Taiwán se ha convertido en uno de los fabricantes de máquinas-herramienta más importantes del mundo. Si hacemos un retroceso, hace diez años este país era uno más dentro de los productores de maquinaria para la industria metalmecánica. El año pasado, Taiwán fue el cuarto exportador de máquinas-herramienta del mundo, con una facturación
de US$3880 millones, detrás de Alemania, Japón e Italia, según el reporte anual hecho
por el Metalworking Insiders’ Report.
Durante 2008, Taiwán fue el quinto productor de máquinas-herramienta, después de Japón, Alemania, China e Italia. Excepto China, los demás han sido productores tradicionales de maquinaria para el trabajo del metal. Esto es un reflejo importante del crecimiento de este país, que se encuentra ahora por encima de productores reconocidos de máquinas-herramienta como Estados Unidos, Suiza, España y Francia. En exportaciones, incluso está por encima de China, que si bien produce más maquinas-herramienta que Taiwán, este último ha sabido promover su maquinaria en el ámbito internacional. Tanto así, que hoy es común ver pabellones de Taiwán en las exposiciones más reconocidas del sector. Precisamente, en la próxima Feria Internacional de la Máquina- Herramienta de Brasil (Feimafe), las máquinas taiwanesas contarán con pabellón
propio, auspiciado por la TMBA (Asociación Taiwanesa de Fabricantes de Máquinas- Herramienta y Accesorios).
En la pasada Timtos (Exposición Taiwanesa de Máquinas-Herramienta), efectuada en el mes de febrero en Taipéi, durante la rueda de prensa organizada para los medios internacionales, el presidente de Tami, Fred Huang, dio un parte positivo de su industria, a pesar de las situaciones difíciles de final de año: “2008 fue un año de cambios dramáticos para la industria taiwanesa de la máquina-herramienta. El primer semestre del año presentó un crecimiento constante, pero en los últimos cuatro meses se evidenció un pronunciado declive de las exportaciones. Sin embargo, 2008 tuvo un incremento importante en varios de nuestros mercados clave de exportación, incluidos la Unión Europea, Brasil, India y Rusia. Los US$5000 millones en producción de máquinas- herramienta logrados el año pasado, representaron un crecimiento de 6,6% comparado con 2007. Y lo más relevante, 70% de nuestras exportaciones son máquinas de control numérico”.
Pero, tal vez, lo más impresionante de una exposición como Timtos es la gran cantidad de visitantes occidentales que asisten en procura de las máquinas taiwanesas. Resulta normal ver europeos, estadounidenses, mexicanos, brasileños, argentinos. Por cierto, Argentina estuvo representada con un stand de Carmahe (Cámara Argentina de la Máquina-Herramienta, Bienes de Capital y Servicios para la Producción), que promocionó la industria metalmecánica del Cono Sur y presentó las ventajas de invertir en el mercado sudamericano en esta época de crisis.
Taiwán ha sabido focalizar su tecnología y su economía para vender sus máquinas y equipos internacionalmente. Se trata de una gente abierta y hospitalaria, que tiene bien claro el camino por recorrer para estar en las grandes ligas de la producción industrial.