El sector automotriz ha sido el más golpeado de la industria plástica durante esta pandemia. Sin embargo, la reactivación en Estados Unidos ha estado jalonando la reapertura.
Desde el punto de vista de transformación de plástico, para satisfacer las demandas de los nuevos vehículos autónomos y las tendencias de automóviles compartidos, se prevé un incremento en la demanda de superficies más robustas, que integren más funcionalidades. También se espera que la industria de composites crezca y que se incremente la demanda de componentes electrónicos para vehículos, tales como conectores y sellos.
La economía circular y el fin de vida de los componentes automotrices jugará un papel cada vez más importante. Es por esto que, cuando se buscan soluciones reforzadas con fibra para dar más rigidez y resistencia, ya se está hablando de matrices termoplásticas, que puedan ser recuperadas. Las piezas para vehículos previsiblemente incrementarán su complejidad y será cada vez más importante adicionar material y refuerzo solamente en las partes funcionales, para lograr el aligeramiento necesario.
Fin.