¿Por qué la inflación afecta a la industria?

 

La inflación está en su punto más alto de los últimos 40 años en Estados Unidos y el Reino Unido. En México ha llegado a su nivel más alto desde agosto del año 2000, ubicándose en el 8.62%.

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El mundo atraviesa por un periodo generalizado de inflación, ante el aumento sostenido de los precios de bienes y servicios. La inflación refleja la disminución del poder adquisitivo de la moneda: una pérdida del valor real del medio interno de intercambio y unidad de medida de una economía. 

Para medir el crecimiento de la inflación se utilizan índices, que reflejan el crecimiento porcentual de una 'cesta de bienes' ponderada. El índice de medición de la inflación es el Índice de Precios al Consumidor (IPC).

El Foro Económico Mundial señala que, Estados Unidos se enfrenta a su mayor en el nivel de inflación más alto de los últimos 40 años, rondando el 8,3%-8,5%. El Reino Unido también está experimentando un récord de 40 años, hasta el punto de que el Banco de Inglaterra ha advertido que la inflación puede superar el 10% en cuestión de meses.

La inflación está en su punto más alto de los últimos 40 años en Estados Unidos y el Reino Unido. En México ha llegado a su nivel más alto desde agosto del año 2000, ubicándose en el 8.62%.

En México la inflación ha llegado a su nivel más alto desde agosto del año 2000, ubicándose en el 8.62%. Según informa El País de España, el aumento ha rebasado todas las expectativas del mercado. De acuerdo con la última encuesta de expectativas de Citibanamex, se esperaba que la inflación no superará el 8,52%.

En su informe Chief Economists Outlook 2022, el Foro Económico Mundial reporta: "En general, las expectativas de inflación son más altas para Estados Unidos, seguido de Europa y América Latina, con un 96%, 92% y 86% de los encuestados, respectivamente, que proyectan que la inflación será alta o muy alta en 2022".

¿Cómo podría afectar esto a la industria?

Hay una serie de factores comunes que han contribuido al aumento de la inflación. La subida de la factura de la energía es el mayor culpable. También está el aumento desmesurado de los precios de los combustibles y el aumento de los costos de las materias primas. 

Al respecto CEDEC, una organización de consultoría estratégica, señala que no hay previsiones a corto plazo de estabilización de la inflación en un punto más o menos sostenible. “Este hecho, afectará mucho a la previsión de recuperación de la economía, afectando tanto a las familias como a empresas que, si no se quiere perder capacidad financiera, y por lo tanto competitividad, deberán analizar su evolución y tener en cuenta que su crecimiento debe estar por encima del dato de inflación actual”. 

Con los niveles de inflación actuales, las empresas difícilmente podrán transferir todo el incremento de los costes de producción, especialmente de las materias primas, a las tarifas finales de los productos o servicios que comercializan.

“Esto haría que aquellas empresas con necesidades de liquidez bajarían los precios para mantener su Cash Flow, lo que causaría un grave daño a medio y largo plazo, que también afectaría al resto de empresas del sector. En resumen un comportamiento errático de los mercados que no favorece a ninguna de las empresas presentes en ellos”, señala el CEDEC.

Por último, otras de las consecuencias de la inflación en las empresas son el aumento de los costes de las compras, de bienes de equipo como maquinaria, de activos como alquileres o los costes de suministros, energía, gasolina, etc.